La pendiente mínima en alcantarillados es un parámetro importante a considerar en el diseño y construcción de sistemas de alcantarillado. La pendiente se refiere a la inclinación de las tuberías del alcantarillado y se expresa en porcentaje o en grados.
Es importante considerar una pendiente mínima adecuada para garantizar un flujo de aguas residuales adecuado y evitar obstrucciones en el sistema de alcantarillado. Si la pendiente es demasiado baja, el agua residual puede acumularse y provocar obstrucciones y malos olores. Por otro lado, si la pendiente es demasiado alta, el agua residual puede fluir demasiado rápido y provocar erosión en las tuberías.
Además, una pendiente mínima adecuada también puede contribuir a reducir los costos de construcción y mantenimiento del sistema de alcantarillado, ya que puede permitir el uso de tuberías más pequeñas y reducir la cantidad de excavación necesaria.